La iniciativa solidaria "Acull un plat", organizada por la Comissió Catalana d'Ajuda al Refugiat (CCAR), prepara su próxima edición que une la pasión de dos personas -un cocinero y una refugiada- por la cocina. Esta propuesta, que se llevará a cabo el viernes 2 de agosto, tiene el objetivo de acercar las historias y recetas que acompañan a las personas que se arriesgan para llegar a Catalunya.
Los protagonistas del acontecimiento son Alberto Pizarro, bartender de la coctelería Bobby Gin, y Victòria, de 33 años y refugiada originaria de Venezuela, donde estudió gastronomía y coctelería. Los dos tienen la intención de traer la versión más refrescante de "Acull un plat", puesto que elaborarán un cóctel/mocktail veraniego, mientras Victòria explica su experiencia tanto del viaje como de su vida en Barcelona, donde hace dos años que reside con su hijo. Decidió abandonar su país debido a la inseguridad que había, y afirma que su situación ha mejorado en la ciudad catalana: "Desde que llegué a España mi vida cambió mucho, el hecho de dejar atrás mi lugar en el mundo, mí familia, a mis amigos, y venir a un país nuevo, sola con mi hijo ha sido todo un reto. Afortunadamente, he tenido la oportunidad aquí de estabilizar mi situación poco a poco, gracias a la ayuda del CCAR y de grandes personas que he conocido durante este tiempo".
El proceso de inmigración y adaptación fue difícil, pero Victòria comprendió que, a pesar de que las cosas no hayan sido fáciles para una persona de su condición, tiene la convicción de que puede ofrecer muchas cosas, y que una persona es valiosa sea donde sea. El CCAR idea este tipo de iniciativas para que todo el mundo pueda conocer la historia personal de alguien que ha pasado este mal momento en su vida. Por eso juntan un refugiado con un chef o especialista gastronómico reconocido, puesto que piensan que, como la cocina no conoce de fronteras, no hay mejor manera de acercar a las personas.
