Enoturisme en kayak, actividades para los más pequeños o una cena entre viñas bajo la luz de las estrellas
El enoturisme cada vez tiene más importancia en nuestro país. Ya son muchos las bodegas catalanas que organizan visitas a sus instalaciones y que ofrecen cursos de cata o paseadas por las viñas. Para este verano, os proponemos tres de muy originales. Enoturisme en kayak a la bodega Perelada La bodega ampurdanesa Perelada propone una actividad muy refrescante. El 3 de agosto, saliendo desde la playa del puerto de Llançà, los participantes navegarán en kayak en dirección al norte, disfrutando del Mediterráneo y observando las viñas verdes de la Finca Garbet, una singular viña que se aboca al mar desde los acantilados de la Costa Brava. Desembarcando a la cala de ningún Raso, con vistas en el cabo de Creus, los participantes disfrutarán de una cata comentada de dos vinos y un cava de la bodega.
La actividad tiene un precio de 40 € y una duración aproximada de 3 horas. Por la tarde, los que lo deseen podrán visitar gratuitamente el museo del Castillo de Peralada. Cenar entre viñas a Bouquet de Alella El 10 de agosto puede ser una noche para recordar, con una cena bajo la luz de la luna y en medio de las viñas de Bouquet de Alella. Un paseo entre los cepos antes de cenar para abrir el hambre permitirá conocer el rico terruño de sauló que predomina a la DON Alella y descubrir el último proceso de maduración de la uva poca antes de la vendimia, con los cepos muy cargados de fruto. La caminata os traerá hasta una de las zonas más elevadas de la finca de Can Boquet, donde un cocinero preparará la cena, que estará muy acompañado de los vinos de Bouquet de Alella y del paisaje que rodea el término. La actividad tiene un precio de 45 €. Enoturisme para los más pequeños a Segura Viudas Normalmente, los más pequeños de la casa quedan excluidos de los programas de enoturisme tradicionales, y este tipo de actividades se orientan sólo a personas adultas. Desde el Heredado Segura Viudas quieren cambiar esta realidad y han pensado en los niños para crear una oferta que los permite acercarse con sus familias a disfrutar del vino y el cava, pero también de la natura y la historia de un paisaje milenario.
Los asistentes son recibidos a la masía con un buen almuerzo de viña que los proporciona la energía necesaria para llevar a cabo la actividad. A continuación, se propone una salida de descubrimiento y conocimiento del entorno y la biodiversidad del Heredado con la participación activa de los más pequeños. Un par o tres de horas después y para cerrar la jornada, los participantes disfrutan de un aperitivo con degustación de cavas y vinos de Segura Viudas mientras se comparten los conocimientos adquiridos.