11 especias que no pueden faltar en la cocina

Originaria de las islas Molucas (Indonesia), más adelante se empezó a plantar también en el Caribe, en Malasia y en la India. De sabor dulce y elegante, una de sus aplicaciones más conocidas es la de condimentar la bechamel, a pesar de que también se utiliza en platos de pasta, purés de patatas o algunos postres. Lo más conveniente es guardarla entera y rallarla en el momento de usarla para aprovechar mejor su aroma.

La especia preferida de los amantes del sabor picante. Hay muchas variedades (se calcula que hasta un total de 26), todas provenientes del continente americano, a pesar de que actualmente se cultiva en todo el mundo. Se trata de pimientos picantes por la presencia, en menor o mayor grado, de capsaicina. Es un antioxidante poderoso que contribuye a la reducción de grasas y del nivel de colesterol.

El curri es un concepto gastronómico demasiado amplio para tratarlo en pocas líneas. Originario de la India, no se trata de una especia en sí misma, sino de una mezcla de especias que cuenta con una infinidad de variantes regionales. Algunos de sus ingredientes más comunes son la cúrcuma, el comino, el jengibre, algún tipo de chile, el cilantro, la canela, la nuez moscada, la mostaza, la pimienta y el clavo.

Seguramente se trata de la especia más conocida y utilizada de este listado. Tiene un sabor picante, que obtiene de un compuesto llamado 'piperina'. La negra se recolecta a media maduración; la blanca madura en el árbol y ya se ha liberado de la cáscara, no pica tanto y es ideal para salsas blancas. También existe la pimienta verde, menos frecuente, en la que los granos todavía no han madurado nada.

Tiene un sabor penetrante y dulce, con notas picantes y una fragancia intensa. Se utiliza mucho en la cocina india y asiática en general, especialmente en curris, arroces, pasteles y algunas clases de pan, o para aromatizar infusiones y cafés. En los países escandinavos se usa, junto con la canela, el jengibre y el clavo, para elaborar galletas. Se le atribuyen propiedades afrodisíacas.

Es la corteza interior del canelero y una de las especias más antiguas, puesto que se han encontrado referencias de hace más de 5.000 años en China. Se trata de una especia muy utilizada en repostería, pero también sirve para aromatizar infusiones y bebidas o para condimentar platos, como por ejemplo el tajín, típico de Marruecos. Es digestiva y muy recomendable para personas que sufren diabetes.

Es originaria de la Sudamérica tropical y subtropical. A pesar de no ser una pimienta desde el punto de vista botánico, comparte el sabor picante, en este caso suave y con notas florales, afrutadas y dulzonas. Da un color muy atractivo a los platos en los que se usa.

Su precio elevado hace que también sea conocido como 'oro rojo'. Es originario de Oriente Medio, pero ya hace siglos que se ha convertido en un ingrediente típico de la dieta mediterránea. Se añade, por ejemplo, a la paella o a algunos platos de pescado y marisco. Tiene propiedades sedantes, expectorantes y afrodisíacas. Conviene guardarlo en la nevera.

Uno de los condimentos más utilizados en la cocina mediterránea. Normalmente se consumen las hojas, a pesar de que los tallos también son comestibles. Tanto si es fresco como si es seco, se puede añadir a ensaladas, sopas, estofados... ¡La lista de aplicaciones es larguísima! Tiene un alto contenido en hierro, algo que lo convierte en muy recomendable para personas con anemia.