Se suma a la oferta de restaurantes donde comer bien y a buen precio y se integra al grupo San Telmo
céntrico canalla bcn
Patatas bravas, ensaladilla rusa, calamares, berenjenas con miel y lima, anchoas, ventresca de atún con tomate, tortilla de patatas, huevos estrellats con varias combinaciones o hamburguesa ecológica de ternera gerundense. Los platos típicos del 'tapeo' y otros platillos más o menos clásicos trufen las cartas de muchos de los últimos restaurantes que están apareciendo en Barcelona. Por moda o para ser fieles a la tradición, la ciudad está recuperando una cocina desimbolta y muy hecha donde la sencillez y la calidad son los disparos distintivos, a mesa, al servicio y al ambiente.
Uno de los últimos establecimientos a reforzar este camino ha sido el Céntrico Canalla. El antiguo local de la calle Talleres con Ramelleres, un clásico del Arrabal en pie desde 1941, cerró antes de Nadal pero desde hace un mes y medio vuelve a saludar la ciudadanía. Y lo hace con la apariencia renovada, pero perfectamente reconocible. Es el Céntrico de siempre, con el confort actual y una sala en el interior que lo alarga y aumenta los argumentos para dejarse caer. Para los quién quieran una copa y una tapa, un bocado y gresca, el espacio alrededor de la barra y a las mesas que miran en la calle es la zona indicada. Quienes prefieren entablarse sin reverencias tienen en el Tigre, el nombre con que se ha bautizado la sala interior, la respuesta a sus peticiones.
Ahora el establecimiento forma parte del grupo San Telmo, que ya cuenta con cinco locales más en Barcelona, y motivo por el cual ha añadido el adjetivo 'canalla' a su nombre. Todos tienen en común la elegancia, la sencillez y el bienestar que proporcionan tanto al paladar como la cartera, cosa hasta ahora relativamente difícil de encontrar en la ciudad. El Céntrico abre cada día de 8 h a 1 h, acoge las jornadas de fútbol más intensas y tiene en la música una compañera imprescindible.