Detrás la imagen deseable de los productos se esconde una realidad muy diferente. Recolectar el producto cuando es verde o no cultivarlo en condiciones naturales provoca que el resultado final sea atractivo para los ojos pero no para el paladar.
Para el estudio la OCU compró a 54 comercios de Barcelona, Valencia, Sevilla y Madrid diferentes frutas y verduras, y estudió la calidad, la presencia en la tienda, el etiquetado e incluso la atención de los responsables del establecimiento. Las conclusiones son que después de probar 350 kilos de estos alimentos, sólo el 5% pueden considerarse productos muy satisfactorios.
Los "alimentos farmacia" son otra de las problemáticas que pueden tener los consumidores. Muchos productos afirman que son ricos en vitaminas, que reducen el colesterol o que ayudan a adelgazar. Para poner fin a este hecho, el diciembre de este año es la fecha tope que la Agencia Europea de Seguridad pone a las empresas alimentarias porque añadan a la información de sus productos un aval científico del que prometen.
