Una treintena de restauradors del barrio barcelonés, agrupados bajo el paraguas de Denominació d'Origen Sants (DO Sants), han puesto en marcha la campaña Sants fa olor a calçot, por la cual, durante quince días, proponen dentro de las respectivas ofertas gastronómicas diferentes elaboraciones con el calçot como protagonista. Hasta el 14 de marzo, en los restaurantes participantes se podrán degustar desde la tradicional calçotada hasta platos mucho más elaborados como como una crema de calçots con huevo a baja temperatura, sofrito de jamón y ajos tiernos; unas minihamburgueses con calçot caramelitzado, gouda y romesco; una espuma de calçots con papada de cerdo y romesco o un bocadillo de pulpo a la parrilla con kimchi de calçots.
35 años de calçots
A pesar de que el calçot es un producto típico de la comarca de la Alt Camp, en Sants desde hace años se puede oler el aroma característico de esta cebolla: el 2020 se celebraron entre enero y marzo más de 20 calçotades en las plazas y calles del barrio. De hecho, el Casal Independentista de Sants organitzó en 1987 la que fue la decana de las calçotades populares a la ciudad. Sin saberlo, crearon un precedente con la fiesta que giraba en torno al calçot, pero también de la salsa, la butifarra y el vino, y que era fruto del trabajo colectivo y se convertía en un espacio de socialización entre el vecindario y una demostración más de cultura popular.
Por su parte, la campaña Sants fa olor a calçot es la iniciativa con que se estrena la entidad DO Sants, nacida a raíz de los cierres y a la pandemia en general, y supone el frente común del sector de la hostelería popular santsenca para superar este momento de crisis partiendo de la colaboración y el apoyo mutuo.
