Preparación
- Cortar cada muslo en tres trozos (yo separo el jamoncito y el contramuslo lo parto en dos).
- Echar un chorro de aceite de sésamo y un chorro de aceite de oliva en el tajine. Salpimentar el pollo y dorarlo por todos los lados. Una vez dorado, reservarlo.
- Cortar la cebolla en juliana. Retirar un poco de aceite del tajine, si fuera necesario, y sofreír la cebolla durante unos minutos a fuego lento. Cuando esté transparente, añadir todas las especias y removerlo.
- Incorporar de nuevo el pollo y las zanahorias peladas. Cubrirlo con agua y dejarlo cocer tapado a fuego lento durante 1 hora.
- Pasado el tiempo, retirar todo el líquido de la cocción. Ponerlo en un cazo y reducirlo junto con la miel. Dejar que se concentre bien para obtener una salsa con una textura como de jarabe.
- Mientras tanto, cortar los calabacines en bastones y ponerlos en el tajine.
- Tostar las almendras y los anacardos en una sartén con un hilo de aceite de oliva. Un vez tostados, añadirlos al tajine y regar con la salsa. Taparlo y dejar que todo se cocine 5 minutos más.
Este tajine de pollo se puede acompañar de cuscús, arroz blanco o quinoa.