Preparación
- Limpiar los caracoles, minuciosamente y uno por uno. Comprobar que están todos vivos y que salen de las conchas. Si hay alguno que no lo hace, dejarlo en agua calentita unos minutos; los que no salgan después del baño caliente hay que rechazarlos.
- Pelar los ajos y limpiar las hojas de menta. Picar todo junto en un mortero y reservar.
- Preparar una cazuela baja o una sartén con un poco de aceite y poner en el fuego (el calor ha de ser muy leve).
- Poner los caracoles dentro de la cazuela cuando todavía no esté caliente.
- Tapar e incrementar el calorr poco a poco. Así es como se consigue engañar a los caracoles, puesto que la mayoría quedarán fuera del caparazón.
- Cuando hayan salido del caparazón, subir la intensidad del fuego y destapar la cazuela. Los caracoles se irán cociendo en las propias babas.
- Cuando la baba desaparezca es cuando hay que añadir los ajos y la menta picados.
- Cocer a fuego medio unos 5 min más.
- Salar y moler la pimienta por encima.