Tres maneras diferentes de comer langosta
Un crustáceo preciado para llenar la mesa de aromas marineros
La langosta es un crustáceo con carne en la cola, el cuerpo y las antenas. La langosta roja (de unos 60 cm) es la típica de las costas mediterráneas, cantábricas y británicas. Es escasa y cara. La langosta más habitual en los mercados ─más económica pero menos sabrosa─ es la verde, procedente del norte de África. Hay muchas maneras de disfrutar de la langosta en e plato, ya sea en una caldereta, un arroz, a la americana, a la catalana, con pularda o a la brasa, entre otros. Nosotros hemos seleccionado tres recetas muy diferentes para comer ¡uno de los marisco estrella!
Tacos de langosta
Tacos de langosta
Una receta marinera al estilo de México, donde la langosta es un crustáceo destacado. De hecho, la región del Pacífico Norte a la costa de Baja California Sur, es la principal zona proveedora de langosta rojo del país azteca, donde se captura desde principios de siglo pasado. En esta receta, os proponemos preparar unos 'tacos' deliciosos con este crustáceo y acompañarlos del toque picando de una mayonesa de 'chipotle'.
Langosta confitada con puré de trompetas de la muerte Becky Lawton
Langosta confitada con puré de trompetas de la muerte
Un plato de mar y de bosque, que combina la langosta, crustáceo apreciado por su sabor, y las trompetas de la muerte, unas setas muy populares. Para redondearlo, habrá que preparar un puré de patatas y una salsa de langosta, verduras y brandi que acabará de potenciar el gusto del crustáceo.
Saltamontes al horno Becky Lawton
Langosta al horno
Dejamos para el final, la tercera opción, una propuesta mucho más habitual que permite disfrutar del sabor delicado de la langosta. Y, además, es muy fácil de preparar, solo habrá que abrir la langosta, acompañarla de las verduras y hortalizas que más os apetezcan, y ¡al horno! Una propuesta deliciosa.
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