5 estofados contundentes

Al pensar en estofado nos viene al cabo, seguramente, la imagen de diferentes trozos de ternera con patatas y guisantes. En este caso, sin embargo, hablamos de lentejas con calamares. El fondo del plato, protagonizado por la legumbre, será la base donde reposará el animal marino de temporada, de hecho, os podéis poner creativos y mirar de combinar todos aquellos ingredientes que creéis que puedan complementar con a los dos ingredientes. Los estofados son cómo el caldo, existen tantas combinaciones cómo cocineros que lo elaboran.

Al inicio hablábamos de sabores concentrados, pues con esta elaboración tendréis trabajo. Cepas, vino rancio, pollo, jamón cocido, pimienta roja, cigalas, y la lista sigue. El fuerte de este estofado, y el secreto, se encuentra en poder equilibrar esta combinación de ingredientes con tanta personalidad. Si conseguís que el plato sea armónico, sin embargo, estaremos hablando de una opción exquisito por cualquier comida.

A diferencia de la elaboración anterior, en este plato no se tienen que combinar tantos sabores, el secreto se encuentra en la preparación del buey. Lo tendréis que dejar macerar entre 3 y 4 horas en vino tinto para que coja un gusto potente. Todos los ingredientes restantes servirán, únicamente, para complementar el sabor protagonista del buey.

Pasamos de la carne al pez otro vez y os proponemos este estofado de judías con cigalas y caldo de pez de roca. La combinación de sabores entre los animales marinos y la legumbre harán de este plato una opción menos pelsada y concentrada que algunos de los estofados que hemos planteado.

Acabamos con un plato que no es muy bien un estofado, puesto que, la elaboración principal es la polenta. Esta no es nada más que sémola de cereales espesada y sazonada al gusto personal de cada cual. Si seguís esta receta, sin embargo, lo acompañaréis con jabalí estofado. Hay que tener en cuenta que la carne de este animal puede ser más o menos tierna dependiendo de su edad, por eso os recomendamos que pidáis en la carnicería, si podéis, de la más joven. Si fuera más madura, haría falta macerar-la más.