El centeno forma parte de los elementos de una panadería desde siempre, sobre todo en el pan que trae su mismo nombre. Aún así, sus propiedades y beneficios para el organismo no son muy conocidos por la gente, de modo que os indicamos sus principales características para que, si ya os gustaba el pan de centeno, comáis todavía más.
- Milenario menospreciado: el centeno, a pesar de ser un cereal que se consume desde hace miles de años, era considerado una comida de pobres, porque se solía asociar a un pan de pobres, de gusto amargo. El grano de centeno, además, es duro e indigesto.
- Beneficioso para el corazón: el consumo de centeno ayuda a prevenir las enfermedades cardiovasculares: tiene propiedades anticoagulantes y favorece la circulación de la sangre.
- Energético: la harina de centeno tiene menos gluten que la de trigo, es más energética y ayuda a hacer la digestión. Un cereal rico en vitaminas y en potasio.
- Pan negro: el pan elaborado con harina de centeno es denso, de fuste fuerte y acostumbra ser de color oscuro. Es muy habitual en los países bálticos y centro-europeos.
- Probiótico: el centeno es rico en fibra soluble, cosa que nos ayuda a mantener el peso a raya y a regular el colesterol, mientras que la fibra insoluble, presente en el trigo convencional, es muy laxante y nos irrita la mucosa de los intestinos.
- Ideal para celíacos: los cereales sin gluten a menudo son difíciles de digerir y pueden generar cierta inflamación, de modo que se recomienda limitar el consumo de cereales o comer cereales integrales sin gluten o con poco gluten y buenos protectores, como el centeno.
