Preparación
- En una cazuela de barro o hierro fundido, poner a calentar el aceite, con la cabeza de ajos entera sin pelar y un poco aplastada de las puntas. Dejarlo dorar un poquito y añadir el laurel y la pechuga de cabrito salpimentada. Dejar que se vaya dorando a fuego moderado. Cuando el cabrito esté dorado, poner el vino blanco, tapar la cazuela, y dejar que cueza a fuego muy lento media hora.
- Mientras tanto, pelar las patatas y cortarlas rasgándolas. Volcar las patatas y el pimiento verde entero en la cazuela y saltearlo a fuego suave 15 min.
- Ir tirando una picada con las almendras, las avellanas, los piñones, un diente de ajo, el perejil y el pan frito. Una vez todo esté bien picado, deshacerla con un poco de agua hirviendo y echarla sobre la caldereta, dejando que se acabe de cocer hasta que las patatas y el cabrito estén bien tiernos. Se puede ir añadiendo agua hirviendo.