1. Con la masa de las galletas, formar los bañistas utilizando un molde adecuado. Si tenéis dos medidas, mejor, puesto que se podrán hacer niños pequeños. Dibujar los ojos y la boca con la glasa real.
2. Teñir el frosting con el colorante morado y esparcirlo sobre la mitad del pastel, formando el mar.
3. Triturar las galletas María y repartirlas por la otra mitad del pastel, simulando la arena.
4. Esparcir un poco de mantequilla (nosotros la endulzamos con azúcar) por toda la pared del pastel.
5. Enganchar los barquillos en el contorno. Colocar la cinta de ropa por seguridad.
6. Para el frosting: con las varillas eléctricas, mezclar la mantequilla y el azúcar hasta obtener una crema muy fina y homogénea. Añadir el queso y seguir batiendo hasta que se integre bien. Tiene que quedar una crema brillante, fina y homogénea.
7. Colocar todos los elementos del pastel que se ven en la foto. ¡Et voilà!