Preparación
- Limpiar las hortalizas y cortarlas en trozos medianos. Hacer una bresa.
- Poner todas las hortalizas, menos la calabaza, en un recipiente hondo de vidrio, con el filete de ciervo cortado a trozos no muy grandes. Sumergirlo con el vino y el brandi, hasta cubrir la carne. Añadir las hierbas aromáticas y las especias.
- Dejarlo marinar en la nevera 12 horas.
- Sacar la carne del marinado y secarla bien con papel absorbente. Colar el jugo del marinado y ponerlo en una cazuela, a fuego bajo.
- En otra cazuela, poner el caldo de carne a calentar, a fuego medio.
- Salpimentar y enharinar un poco la carne, sacar el exceso de harina.
- Poner una cazuela a fuego medio con aceite, añadir los trozos de carne e ir girándolos a medida que la harina se vaya tostando ligeramente. Retirar la carne y reservarla en un recipiente. Añadir la pasta de tomate y removerlo bien, 2-3 minutos.
- En la misma cazuela, añadir el vino caliente del marinado e ir removiendo para que se forme una salsa con la harina de freír la carne y la pasta de tomate.
- Dejarlo hervir a fuego bajo, 10 minutos. Remover de vez en cuando, para evitar que se enganche la harina al fondo de la cazuela.
- Añadir los trozos de carne a la cazuela y cubrirlos con el fondo de carne caliente. Rectificar de sal y pimienta. Si hace falta, añadir azúcar para rectificar el exceso de acidez.
- Tapar la cazuela y dejarlo cocer 40-45 minutos, hasta que la carne esté tierna. Ir removiendo de vez en cuando. Si hace falta, añadir caldo. Cuando falten 18 minutos para acabar la cocción, añadir la calabaza.
- Abrir la granada por la mitad y, con la ayuda de una mano de mortero, desgranarla. Reservarla en un bol.
- En una sartén, poner un chorro de aceite y saltear las espinacas. Salpimentar y dejar que se evapore el exceso de agua. Añadir la granada y el vinagre balsámico, y saltearlo 3-4 minutos más para que se reduzca el vinagre.
- Añadir el salteado al final de la cocción del ciervo. Remover bien, para que se mezclen todos los ingredientes.