1. Para la pasta de dátiles: poner a hervir el agua y abocarla sobre los dátiles. Hidratarlos 2 h, colar el agua y poner los frutos en una picadora hasta que quede una pasta.
2. Para las galletas: poner el aceite y la pasta de dátiles en un bol y mezclarlo con las manos. Añadir la sal, el huevo y la piel de limón rallada.
3. Tamizar la harina, la canela y el impulsor e incorporarlo a la pasta de dátiles hasta que absorba la harina. Añadir los copos y el segón y mezclarlo.
4. Hacer bolas de unos 60 g con las manos y ponerlas en una bandeja de horno con un papel sulfurado debajo (máximo 6 por bandeja, puesto que crecen mucho).
5. Aplastar un poco las bolas con las manos, ponerlas 30 min al congelador y después cocerlas 10 min al horno a 185 ºC.
6. Sacar las bolas del horno, dejarlas enfriar y servirlas con crema de cacao casera.